El impacto de las neurociencias cognitivas, afectivas y sociales
Este 2019, Agustín Ibáñez, actual investigador del Centro de Neurociencias Social y Cognitiva de la Escuela de Psicología UAI, fue designado visiting fellow del Center of Advanced Studies (CAS) de la Universidad de Munich, Alemania, que le permitirá interactuar con académicos eminentes en diferentes disciplinas, con el fin de desarrollar proyectos conjunto.
Formar parte del CAS constituye una excelente oportunidad para desarrollar redes de colaboración con la Universidad de Múnich y otros centros Europeos, en dos de las líneas de investigación más importantes que desarrolla el académico, una de ellas consiste en el estudio de la demencia a nivel latinoamericano y su impacto global, “para ello estamos desarrollando redes de colaboración para comparar la genética y el nivel socio-cultural, estudiando su impacto neurocognitivo en pacientes con enfermedad de Alzheimer y demencia frontotemporal”, explica Agustín.
La otra línea de investigación tiene que ver con el estudio neurocientífico de fenómenos sociales, tales como la empatía, la cooperación social, las emociones morales, la violencia grupal, o la intersubjetividad, que han sido tradicionalmente estudiados por las ciencias sociales, “el objetivo aquí es poder discutir cómo los aportes neurocientíficos pueden o no ser relevante para la discusión societal”, señala.
Su nombramiento, le permite participar en paneles internacionales donde se trabajan colaboraciones entre Irlanda y Latin América en temas de salud cerebral y demencia, uno de ellos fue la conferencia “Schadenfreude, Counter-Empathy, and Moral Cognition: A Window into the New Field of Intercognition”, que tiene como fin evaluar el impacto de las neurociencias cognitivas, afectivas y sociales (NCAS) a nivel societal, específicamente en el área de la cognición moral. “Las neurociencias tradicionales han asumido la mente humana como una entidad sin cuerpo, guiada por una racionalidad lógica, y aislada de la cultura. Sin embargo, las diferencias entre la cognición salvaje (es decir, la de la vida social cotidiana) y la cognición fragmentada de los laboratorios neurocientíficos se hace evidentes en el estudio de la cognición moral”, en este sentido, Agustín Ibañez propone un enfoque de inter-cognición basado en la inclusión del estudio del contexto, que puede ayudar a superar la visión aislacionista-pasiva de los enfoques neurocognitivos clásicos.
Convenios Internacionales
En la Universidad de Múnich Agustín Ibáñez adelanta que postulará a fondos para realizar intercambio de datos y estudios multicéntricos.
Con el Atlantic Institute, y el Global Brain Health Institute (GBHI) de las Universidades de California San Francisco y el Trinity College de la Universidad de Dublín, se potenciará el desarrollo de redes en latinoamericanas para el estudio del envejecimiento cerebral.
Mientras que en Tübingen, específicamente con el Werner Reichardt Centre for Integrative Neuroscience, se está desarrollando un protocolo único con estimulación magnética transcraneal y el registro simultaneo de resonancia magnética funcional, “esta combinación de métodos en simultáneo solo es posible en unos pocos centros en el mundo, y permitirá entender mejor futuras intervenciones (con estimulación cerebral) para el tratamiento de procesos cognitivos que se ven afectados por la neurodegeneración”, finaliza Ibáñez.
Abstracto: Marcadores neurocognitivos multimodales de sintonización interoceptiva en cocaína ahumada
Los modelos neurocognitivos contemporáneos de drogadicción han asociado esta condición con cambios en la interocepción, es decir, la detección y el procesamiento de señales corporales que cumplen funciones homeostáticas relevantes para el inicio y mantenimiento de conductas adictivas.
Sin embargo, la mayoría de las pruebas anteriores son inconsistentes, conductualmente inespecíficas y prácticamente nulas en términos de marcadores electrofisiológicos y multimodales directos.
Para sortear estas limitaciones, realizamos la primera evaluación de la relación entre la interocepción cardíaca y la dependencia de cocaína fumada (SCD) en una muestra de (a) 25 participantes que cumplían los criterios de dependencia de dicha droga, (b) 22 participantes adictos a insuflados cocaína clorhidrato (solo para la evaluación del comportamiento), y (c) 25 controles sanos emparejados por edad, género, educación y nivel socioeconómico.
Utilizamos una tarea validada de detección de latidos cardíacos (HBD) y modulaciones medidas del potencial evocado cardíaco (HEP) durante la precisión interoceptiva y las condiciones de aprendizaje interoceptivo.
Complementamos estos datos conductuales y electrofisiológicos con análisis de conectividad estructural (MRI) y conectividad funcional (fMRI) fuera de línea de los principales centros interoceptivos.
Los resultados de HBD y HEP mostraron de manera convergente que los sujetos con SCD presentaban medidas psicofisiológicas en curso de mayor precisión interoceptiva.
Este patrón se asoció con un ajuste estructural y funcional de redes interoceptivas (volumen reducido y segregación de red especializada).
Tomados en conjunto, nuestros hallazgos proporcionan la primera evidencia de una asociación entre la interocepción cardíaca y la cocaína ahumada, apoyando parcialmente los modelos que proponen la hiperinterocepción como un aspecto clave de la adicción./